enero 11, 2012

Acostumbrado, equivocado, no veo el cielo, está nublado.
Apareciste sin que te buscara nadie, no esperaba encontrarte ahí.
Tal vez tu risa no tenía sombras, no tenía cara, fue todo lo que vi.
Me prestaste un beso, me prestaste calma, me prestaste todo lo que me faltaba.


Tenés la receta justa para hacerme sonreír
y todo el tiempo sabés lo que me asusta; sabés lo que me gusta, estar con vos.
Me robaste el cuerpo, me robaste el alma, ya es tuya la voz con la que antes cantaba.


Me quitaste el sueño, me quitaste el habla
pero si estoy con vos, no necesito nada.

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