abril 09, 2012

LetTheRAINFallDown.-

Estoy escuchando la sirena del cuartel de bomberos de la zona anunciando alerta meteorológico. 
Siempre amé la lluvia, nunca me asustaron las tormentas ni mucho menos, es más, los rayos y relámpagos me parecen más atractivos que una fortuna de fuegos artificiales. 
Pero ahora se me pone la piel de gallina, no sé exactamente por qué. Sé que la tormenta eléctrica del miércoles pasado no me causó nada, salvo una preocupación: tenía miedo que aumente la lluvia, que los vientos se volvieran más fuertes y que las descargas eléctricas fueran más peligrosas, tenía miedo que me suspendan el recital de Foo Fighters. Sí, sólo eso me preocupaba, porque no me parecía una tormenta tan jodida desde la platea alta del odiosamente inmenso estadio Monumental de River. 
Al otro día del recital, me tuve que fumar a mi vieja casi 48hs (obviamente paró para dormir) viendo en los noticieros los desastres que había dejado dicha tormenta a su paso. Tan insoportable era que creo que logró meterme el miedo de pensar en lo que nos podría haber llegado a pasar a mí, a mi novio y a mis amigos en ese clima de mierda.
Ahora estoy escuchando la sirena, y me altera los nervios. El pronóstico no dice 'lluvia', dice 'probabilidades de tormentas intensas'. Tal vez no llegue ni a la mitad de lo que fue la semana pasada, capaz sólo caigan unas gotitas y pare, como venía 'lloviendo' ultimamente, pero por primera vez en mis casi 21 años, tengo miedo de un alerta meteorológico.

Esto me remite a lo que estuvo dando vueltas en mi cabeza por varios meses ya, desde que no tengo a mi viejo acá al lado mío estoy teniendo como una regresión a mi infancia, no totalmente, sino de un cierto modo extraño que hace que constantemente me sienta vulnerable. No puedo dormir bien por las noches porque tengo pesadillas y me nacen las ganas de ir a meterme en la cama con él y mi vieja como cuando era chiquita, pero ya no puedo y me provoca un nudo en el estómago y lágrimas corriendo por mi cara, y eso es un simple ejemplo. Cada día que pasa me voy sintiendo más indefensa, siento que necesito todo el tiempo que alguien me diga que todo va a estar bien, que alguien me recuerde que soy más fuerte que esto, pero no. Porque mi familia nunca se llevó el premio a la más atenta, y no puedo mantener a mis amigos o a mi novio encadenados a mi alrededor todo el tiempo, pendientes de mí, porque cada uno tiene su propia vida que vivir, y yo debería manejar mejor la mía, mirar adelante y seguir. Pero algo no está bien.. tengo miedo.. tengo miedo de la tormenta.


Y esta es la clase de cosas que no escribo en el blog sino en mi cuaderno, pero lo estoy usando para apoyar la netbook y que no me de tanto calor en las piernas mientras estoy hecha un bollo en la cama, o sea que si, estoy publicando esto acá sólo porque me da paja moverme 10cm para ponerme en otra posición y agarrar el cuaderno, enjoy (?).